Por segundo año consecutivo, California aumenta el salario de los médicos y dentistas que atienden a los residentes más pobres del estado, en el marco de un acuerdo legislativo destinado a mejorar el acceso de los pacientes a la atención sanitaria.
En el nuevo presupuesto estatal, que entró en vigor el domingo, los legisladores asignaron algo más de 1.000 millones de dólares para pagar tarifas más altas a los médicos y dentistas que aceptan pacientes cubiertos por Medi-Cal, la versión estatal del programa federal Medicaid para residentes con ingresos bajos.
La financiación incluye 220 millones de dólares para ayudar a médicos y dentistas recién licenciados a pagar sus préstamos estudiantiles si se comprometen a ejercer en zonas desatendidas.
Los fondos estatales se complementarán con fondos federales, con lo que el aumento total ascenderá a 2.000 millones de dólares.
"El mensaje a los médicos que están recibiendo esos cheques es: 'Pueden abrir sus puertas, pueden ver a más pacientes'", dijo el Dr. Ted Mazer, presidente de la Asociación Médica de California, el grupo de presión de los médicos que impulsó la Proposición 56, el impuesto sobre el tabaco que está financiando los aumentos de las tasas.
Medi-Cal cubre a unos 13,5 millones de californianos, aproximadamente un tercio de la población del estado.
California ocupa el puesto 48 entre los estados y el Distrito de Columbia en cuanto a reembolsos a proveedores de Medicaid, y los médicos llevan mucho tiempo culpando a las bajas tarifas de impedirles participar en el programa. (Tennessee fue excluido de la clasificación).
El año pasado, las tarifas aumentaron entre 5 y 50 dólares por 13 servicios diferentes, incluidas las visitas ordinarias al consultorio y las evaluaciones psiquiátricas. Este año, las tarifas aumentarán para 10 servicios adicionales, incluidas las visitas de atención preventiva pediátrica - y muchos de los aumentos del año pasado subirán aún más.
El Departamento de Servicios de Salud del estado, que gestiona Medi-Cal, dijo que todavía está perfeccionando los detalles y espera que su plan de aumento de sueldo que se finalizará el 30 de septiembre. Los pagos más altos serán retroactivos al 1 de julio.
Los aumentos de las tarifas son una "gran ayuda para el acceso", dijo Brianna Lierman, director ejecutivo de los Planes de Salud Locales de California, una asociación comercial de 16 planes de salud sin fines de lucro que cubren alrededor de 10 millones de afiliados a Medi-Cal.
Lierman dijo que los aumentos de sueldo de Medi-Cal del año pasado indujeron a algunos médicos a ver a más pacientes de Medi-Cal, aunque su organización no llevó un registro de cuántos.
"Los planes han podido utilizar los pagos mejorados para atraer a más médicos a sus redes", dijo.
Según Mazer, los proveedores acaban de empezar a recibir los cheques de aumento de tarifas por los servicios prestados el año pasado. Esto se debe a que el gobierno federal acaba de dar luz verde a las tarifas del año pasado.
Mazer, cirujano de cabeza y cuello en San Diego, dijo que se quedó "estupefacto" cuando recibió un cheque de un plan de salud de Medi-Cal que agrupaba los aumentos de las tarifas por la atención que prestó durante el año pasado.
"Fueron cinco dígitos, y eso es más de lo que esperaba", dijo.
Mazer dijo que espera que la aprobación federal sea más rápida este año.
Los últimos aumentos salariales acercan las tarifas de Medi-Cal a las que reciben los proveedores de otras aseguradoras, como Medicare y los planes privados, añadió.
El presupuesto estatal asigna 500 millones de dólares a los médicos que atienden a pacientes de Medi-Cal y 210 millones de dólares a los dentistas que atienden a pacientes inscritos en Denti-Cal, el programa dental para los afiliados a Medi-Cal. Otros beneficiarios son los profesionales de la salud de la mujer, que recibirán 49 millones de dólares de aumento salarial.
Se espera que los pagos más elevados por servicios básicos como las visitas al consultorio ayuden a unas 300 clínicas a mantener su viabilidad financiera, dijo Carmela Castellano-García, directora ejecutiva de la Asociación de Atención Primaria de California, que defiende las clínicas comunitarias. Las clínicas comunitarias atienden principalmente a los beneficiarios de Medi-Cal y a los californianos sin seguro.
"Esta subida de tarifas es realmente crítica", dijo. "Ahora mismo lo están pasando realmente mal".
Castellano-García dijo que muchas clínicas están en una situación financiera inestable porque Medi-Cal paga menos que los planes de salud comerciales. Señaló dos clínicas de San Francisco quese han fusionado recientemente con otras organizaciones sanitarias para mantenerse a flote.
El aumento de las tasas también se espera que traiga alivio a la muy criticado programa Denti-Cal. El año pasado, los dentistas experimentaron un aumento del 40 por ciento de las tasas para el trabajo de restauración y quirúrgico, tales como coronas y extracciones.
Antes de los aumentos, los pagos de Denti-Cal eran "lamentablemente insuficientes para pagar las facturas, por lo que muchos dentistas en los últimos 10 años finalmente dijeron 'basta' y se dieron de baja", dijo el Dr. John Blake, director dental de la Clínica de Salud Dental Infantil en Long Beach.
Los cuidados dentales preventivos, como limpiezas, radiografías y servicios periodontales para tratar las enfermedades de las encías, quedaron excluidos de las subidas de tarifas del año pasado, pero los dentistas esperan que se incluyan este año.
Esos servicios son el "pan de cada día" de la mayoría de las consultas, y muchos dentistas aceptarían tratar a pacientes de Medi-Cal -o aceptarían más si ya lo hacen- si subieran las tarifas, dijo Blake, que también es presidente del Consejo de Asuntos Gubernamentales de la Asociación Dental de California.
Para atraer a médicos y dentistas a zonas donde no hay suficientes proveedores de Medi-Cal, el nuevo presupuesto financia programas de devolución de préstamos: se destinan 190 millones de dólares a ayudar a los recién licenciados en medicina a pagar sus préstamos y 30 millones de dólares a ayudar a los nuevos dentistas a pagar los suyos, a cambio de trabajar en las zonas más necesitadas. Los funcionarios estatales aún están ultimando los detalles, como el tiempo que los proveedores deben comprometerse a trabajar en regiones desatendidas.
El Dr. Jerry Abraham, médico de atención primaria en Eisner Health, una clínica comunitaria cerca de Skid Row en Los Ángeles, dijo que un programa de reembolso de préstamos le permitió atender a pacientes pobres -entre ellos personas sin hogar, ex reclusos y personas que luchan contra la adicción- a pesar de su deuda de 250.000 dólares en la escuela de medicina.
Abraham, que estudió medicina en Texas, dijo que pudo aceptar el trabajo en Los Ángeles gracias a un programa federal que pagó casi la mitad de su deuda estudiantil en cuatro años.
"Esa pequeña zanahoria marcó una gran diferencia", dijo.